Durante casi tres décadas, he tenido la oportunidad de trabajar con presidentes, artistas y atletas de primer nivel, ejecutivos de las compañías más grandes del mundo y líderes del Network Marketing de más de 100 países. Todos ellos tienen un hábito que los distingue de la persona promedio: No tienen excusas. ¡Mataron sus vacas!
Yo mismo, cuando dejé mi país a los 19 años y llegué a Estados Unidos sin saber el idioma, sin conocer a nadie, sin papeles y sin más credenciales que un diploma de escuela secundaria y menos de doscientos dólares, tuve que matar muchas vacas que me detenían de lograr los sueños que quería hacer realidad. Pero gracias a haberlo hecho, logré escribir mas de 35 libros y pude crear varias empresas que han generado más de 30 millones de dólares, viajando por más de 25 países, haciendo lo que amo: ayudar a otros personas a hacer sus sueños realidad.